Sobre mi

Soy Psicóloga de Profesión y música de vocación, con una especialidad en Gerencia Social y estudios en Gestión de proyectos, métodos de educación participativa y habilidades gerenciales. 

Siempre inquieta por la vida, inicié mi camino laboral a los 16 años trabajando como maestra de educación primaria y de música en una pequeña Fundación Educativa  ubicada en un barrio de extrema  vulnerabilidad en Soacha en el Departamento de Cundinamarca en Colombia  experiencia que me llevó a elegir  posteriormente la Psicología como mi camino de formación profesional. Pasé toda mi carrera trabajando algunas horas en esta Fundación y acompañando como Coordinadora, un Proyecto de Arte y Cultura. Doy gracias a la vida por esta experiencia que marcó todo lo demás.

Terminada mi carrera a los 22 años partí de mi casa en Bogotá a la Ciudad de Medellín donde trabajé para una Organización Internacional dedicada a la promoción de vivienda digna y después de dos años de arduo trabajo y aprendizaje fui nombrada a los 24 años como Directora Ejecutiva, oportunidad que me dio la posibilidad de aprender, formarme y ganar experiencia en el contexto internacional y nacional. Por algún tiempo fui la mujer más joven en Latinoamerica en este cargo.

Trabajé para el Ministerio de Salud, para el DANE, y para diferentes Fundaciones en Colombia y por un corto tiempo para una Fundación Peruana. He facilitado diversidad de espacios participativos en temas como planeación estratégica, diagnósticos, comunitarios, sistematizaciones de experiencias, fortalecimiento organizacional. En mis últimos 8 años dediqué todo mi esfuerzo y trabajo a la Fundación Sanar como Directora Ejecutiva experiencia que valoro profundamente y con la que aun sigo conectada emocional y afectivamente. Creo que será así para siempre.

¿Por qué hago lo que hago?

El contexto en el que me he desarrollado tiene una característica muy especial y es que está compuesto en su mayoría por mujeres, todas en realidad muy capaces y con un espíritu de servicio y compromiso únicos, yo me cuento y me referencio  como una de ellas. Sin embargo, también he encontrado que estos niveles de responsabilidad, esta disposición a ayudar y a dar de sí para cambiar una situación social, a veces viene con la dificultad de balancear la vida personal, familiar y social con el complejo y demandante mundo laboral.

Desgaste físico y emocional, estrés, enfermedades, conflictos familiares, aislamiento social, una necesidad de conversar y pedir ayuda, de encontrar espacios para canalizar esa energía o capacidad interna y creativa  en cosas diferentes al trabajo, me llevaron  a entrar en el mundo de las terapias alternativas en el 2019 al menos como una excusa para aprender cosas nuevas. Lo que no sabía yo,  era que esto y otras vivencias personales producirían una ola de cambios que rápidamente me regresaron a la independencia laboral, a la consultoría profesional, a mi casa.

Este espacio que es tan mio como tuyo, es el producto de este momento personal de cambio en el que siento que puedo poner mi experiencia, conocimiento, pero sobre todo mi capacidad de escucha amorosa y actuante para que puedas potenciar, desarrollar o encontrar respuestas a tres cosas a las que les he puesto nombre así:

SER:  Encontrarte o reencontrarte con tu identidad y propósito personal y desde allí sentirte más plena y feliz cada día.

CRECER: Que cuentes con herramientas y recursos que te permitan cualificar tu labor y tu trabajo considerando tu humanidad, tu salud, tu autocuidado.

FLORECER: Encontrar espacios formales e informales de encuentro para conversar, escuchar o aprender nuevas cosas que te servirán para Ser y Crecer.

Mis retos cada día para
Ser
Crecer
Florece

  • Cultivar mi espiritualidad y dar gracias a Dios y a la vida
  • Dar gracias, gracias, gracias (tres veces) por cada día, cada cosa que tengo, por las que aun no tengo y las que vendrán.
  • Abrazar el conjunto de cosas que soy con amor y agradecimiento
  • Meditar para encontrar en ese silencio interior el balance que necesito
  • Perdonarme por las cosas que aplazo, omito, no hago y hacerlas
  • Respirar cada vez que viene el «no puedo», «tengo miedo»
  • Estudiar cada día y aprender algo nuevo no importa lo simple que sea
  • Hablar con una amiga o con varias
  • Tomar una copa de vino de vez en cuando
  • Encontrarme con amigos y amigas
  • Leer un buen libro
  • Escribir mis tareas, pensamientos, canciones, reflexiones
  • Abrazar amorosamente la oportunidad de ser mamá y dedicarle tiempo a mis hijos
  • Dormir bien
  • Ver una buena película o serie a mi ritmo y sin presiones
  • Y la lista sigue y sigue……

Y tu…¿qué haces cada día por ti y para ti?

¡Bienvenida!

Gracias por acompañarme

Elizabeth Campos